¿Cuáles son los 3 tipos de ascensores que existen?
Seguramente pocas veces te hayas parado a pensar cómo funciona realmente un ascensor. De hecho, a pesar del uso frecuente que le damos a estos aparatos, poca gente sabrá que existen varios tipos de elevadores, cada uno con un sistema de funcionamiento distinto.
Los criterios para valorar la diversidad de ascensores pueden ser muy amplios, pero generalmente cuando hablamos de varios tipos nos referimos especialmente a una clasificación que los divide según el mecanismo de funcionamiento y tracción.
Así pues, según este criterio podemos diferenciar entre electromecánicos, autoportantes e hidráulicos:
- Ascensores electromecánicos: La tracción en este tipo de ascensores se realiza por medio de un motor eléctrico, una máquina reductora y una polea que contiene un cable de tracción que será el que arrastre la estructura. El contrapeso en estos ascensores estará situado en el fondo de la cabina o en un lateral, dependiendo del espacio del que se disponga.
Este tipo de ascensores son los que más se usan en edificios de varios pisos y grandes empresas. Tienen una velocidad y capacidad de recorrido mayor a la media, pudiendo llegar a una altura mayor y cargar más peso que las otras modalidades. Como punto negativo, podemos destacar que el mantenimiento tiene que ser más exhaustivo que en los otros casos.
- Ascensores autoportantes: Tienen la máquina de tracción dentro del propio hueco del ascensor, generalmente en la parte del superior. Donde antes se situaba la sala de máquinas ahora pueden instalarse otros elementos.
Estos elevadores son los más modernos, por lo que lo más seguro es que sea el tipo que menos hayas visto. Al requerirse menos espacio para la instalación, son ideales para pequeñas viviendas o espacios donde no haya mucha amplitud.
- Ascensores hidráulicos: Estos ascensores no tienen la necesidad de una sala de máquinas superior, pudiendo instalarse a varios metros en vertical. No están recomendados para grandes alturas, de forma que en edificios superiores a 20 metros es mejor optar por los electromecánicos.
Es importante mencionar que son ascensores muy seguros, minimizando riesgos ante cortes de luz e incluso seísmos. Además, las tareas de mantenimiento son menos exigentes que en los electromecánicos, siendo ideales para edificios donde no se pueden modificar las estructuras internas.